Lo tradicional ese día es ir a celebrarlo a Ámsterdam, vestidos con el color nacional, el naranja y dar rienda suelta a la imaginación. Ese día es la anarquía total, vale todo. Lo que quizás más llama la atención son las discotecas que se montan en los barcas que van recorriendo los canales. Para el año que viene sin falta alquilamos una. Las calles están llenas de gente naranja, los parques con conciertos multitudinarios y el buen ambiente reina por todas las esquinas. No hay más que ver las fotos, eso si tras la previa censura, jejej ;-))
El resto de las fotos están por llegar...
2 comentarios:
Igoneeeeee!!!!!!
Que me apunto a tu blog. A seguir tus aventuras XD que ya veo que te va increíble.
Besos.
Rik.
joer! menuda fiesta q nos metimos!!! fue genial!!
la verdad q fue un acierto ir esos días. Y ya sabes que lo pasé genial. Y me vino muy bien xa descansar tb. Fue redondo.
Gracias x esos días.
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